‘Motril Acoge’ organizó un ‘Círculo de Silencio’ para visibilizar los derechos de las personas migrantes y denunciar la violencia de género en el contexto migratorio
Fotos Miguel Salinas
La asociación ‘Motril Acoge’ desarrolló en la plaza de la Aurora de Motril un ‘Círculo de Silencio’ para concienciar a la ciudadanía sobre la necesidad de reconocer los derechos de las personas migrantes y su traducción en políticas concretas de la Administración, así como en actitudes de la ciudadanía.
La Organización, en este mes en que se conmemoraron el Día de la Mujer y el Día Contra el Racismo, dos fechas de especial significado para sus actividades en pro de la Igualdad y la Justicia Social, quiso renovar su llamamiento a la ciudadanía para hacer visible que también en el fenómeno migratorio se reconocen violencias específicas hacia las mujeres, lo que añade más crueldad a una situación ya de por sí injusta.
Motril Acoge pidió a la ciudadanía que entendiera que el feminismo, lejos de pedir privilegios, como interesadamente señalaban algunos mensajes reaccionarios en boga, es un pensamiento de defensa de la Igualdad real y efectiva. Un pensamiento que pretende eliminar las discriminaciones y violencias que la mitad de la población soporta día a día, solo por el hecho de su condición de mujer: feminicidios, trata de mujeres, abuso sexual y discriminación laboral, entre otras.
No obstante, los convocantes también quisieron resaltar el carácter resiliente que su historial de lucha ha forjado en las mujeres, reconociendo su esfuerzo por sostener las redes familiares y sociales, por construir espacios de solidaridad y apoyo mutuo, y por mantener encendida la llama de la dignidad. Eran valores que la sociedad necesita y que se puede ver con mayor claridad en las mujeres y en el pensamiento feminista.
También se denunció el racismo cotidiano, con todo su bagaje de discriminación y violencia institucional, como un estigma que hace que la sociedad en general sea víctima de mensajes de odio. «Mensajes que nublan su entendimiento hacia algo que es patente para quien quisiera verlo: que las personas migrantes no solo no son una carga, sino que aportan con el fruto de su trabajo gran parte del bienestar del que goza la sociedad».
Motril Acoge mostró su protesta por los sufrimientos y pérdidas humanas que se producen en las rutas migratorias y, en consecuencia, se pidieron vías seguras de migración, justicia, solidaridad y respeto a los derechos humanos.
Por último se leyó un manifiesto y se guardó un minuto de silencio por todas las víctimas.